viernes, 30 de agosto de 2013

A 7 años de la solicitud de moratoria Santo Domingo de Heredia requiere de la aprobación de parte del Concejo Municipal de una moratoria en la construcción de condominios, urbanizaciones, apartamentos, negocios comerciales grandes, etc, con excepción de las viviendas normales, hasta tanto no se cuente con un plan regulador y se halla solucionado problemas como la falta de un alcantarillado sanitario, falta de agua, falta de un plan maestro de desfogues pluviales, etc.

A 7 años de la solicitud de moratoria

Las fuerzas vivas de Santo Domingo de Heredia, con el aporte del Grupo Cívico Domingueño y coordinadas por la Unión Cantonal de Asociaciones de Desarrollo, trabajaron,  desde el 2007, en la presentación ante la Municipalidad de Santo Domingo de Heredia  de una Moratoria en la construcción de condominios, urbanizaciones, apartamentos, edificios, negocios comerciales  grandes, hasta tanto estuviera bien claro el suministro de agua, el impacto en el cantón en todos los ámbitos: salud, educación, infraestructura, ambiente, la presión vehicular, las vías de acceso, los desfogues pluviales, la ausencia de aceras, tratamiento de los desechos, el congestionamiento vial, contaminación del Río Virilla, Bermúdez y acequias, falta de alcantarillado sanitario, ausencia de plantas de tratamiento, el desplazamiento de los coterráneos, la privatización de calles y servicios en los condominios,  etc. También se mencionó la importancia de la tarifa hídrica para proteger los mantos acuíferos.

Gran cantidad de dirigentes comunales y personas de la comunidad nos hicimos presentes el jueves 17 de enero del 2008, a la sesión municipal y entregamos el documento respetivo así como el intercambio de opiniones con los regidores de ese entonces, como consta en el Acta N°04-2008.

La respuesta ha sido el silencio tanto del anterior  como  del actual Concejo Municipal.

En estos 7 años la situación ha empeorado. Siguen dando permisos de construcción,  porque oficinas fuera del cantón dan permisos; por consiguiente, según el estribillo   “todo es legal, nada se puede hacer”  y no existe la voluntad de entrarle realmente a los problemas que se están produciendo. Los urbanizadores amenazan a los regidores para que les den las autorizaciones. Han sido, en situaciones críticas y evidentes, cuando  los diversos sectores del cantón  han tenido que reaccionar y  luchar para que no les “tiren” más agua pluvial y ocasionen otro tipo de dificultades como la inundación de sus   viviendas. Incluso han tenido que recurrir a la Sala Constitucional, donde la Municipalidad ha sido condenada.  Todos los problemas continúan sin resolverse.

A pesar de la historia domingueña, donde se evidencia el esfuerzo de nuestros antepasados por hacer de esta comunidad algo diferente, los actuales líderes políticos municipales han dejado que esta situación se les vaya de las manos. Los urbanizadores aprovechan las contradicciones de las leyes, así como el campo de acción   de la administración y el poder del Concejo Municipal. 

Pero conforme se acercan las elecciones para elegir a los miembros del Concejo Municipal y Alcaldía, como buenos politiquillos para obtener votos  nos prometen  que van a solucionar los problemas que nos aquejan, pero todo permanece igual. Del Santo Domingo de hace algunas décadas al actual, en obras comunales no ha existido nada significativo, lo que ha aumentado son los problemas de todo tipo, la congestión vial es terrible y el paso de tráileres no se detiene. Producto de todo ese ruido y otros factores externos la población domingueña está padeciendo en gran medida de trastornos mentales según lo expresado por el Director de la Clínica de Santo Domingo en una reciente intervención en el Salón Parroquial.

Es urgente que la Comisión de Obras de la Municipalidad u otra Comisión Municipal específica  retome los documentos aportados hace 7 años (Acta 04-2008), se apruebe la moratoria cuanto antes  y  se comience de inmediato a reglamentar los permisos de construcción en Santo Domingo. Esperamos que este llamado urgente  tenga el apoyo de todos los regidores, quienes, se nota en las actas leídas en los últimos años, tienen la conciencia de que los problemas están alcanzando dimensiones insospechadas. La comunidad domingueña les agradecerá el necesario esfuerzo para que se ordene de una vez por todas estas situaciones.     

GRUPO CIVICO DOMINGUEÑO.     Jueves 29 de agosto del 2013


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