jueves, 23 de abril de 2020

Santo Domingo opto por el cambio por medio del partido político cantonal Movimiento Avance Santo Domingo =MAS


SANTO DOMINGO OPTÓ POR EL CAMBIO

“Encomienda al Señor tu camino, confía en Él, que Él actuará”

En las pasadas elecciones municipales , Santo Domingo de Heredia nombró a sus autoridades municipales y optó por darle el poder político a un partido cantonal “Movimiento Avance Santo Domingo”, MAS,   fundado el 31 de octubre del 2008.

 La comunidad domingueña confió la Alcaldía y dos Regidurías a este Partido Político, asi como eligió a un nutrido grupo de síndicos  y concejales de distrito

La Alcaldía será dirigida, pues, por el Ingeniero Civil Roberto González Rodríguez, la Periodista Yendry Madrigal Vásquez y el Ingeniero Agrónomo Armando Vásquez. Los regidores serán  Gilbert E Rodriguez Alvarado y Maria Elena Ordoñez Villalobos cc Villalobos Cordero.

Hace ya varios años, el Grupo Cívico Domingueño ha expresado de diferentes maneras su pensamiento sobre el desarrollo de nuestro pueblo en muchos ámbitos: cultural, deportivo, religioso, ordenamiento vial y territorial, participación, coordinación con cantones cercanos, educativo, salud , interacción de las fuerzas vivas. No solamente hemos dado ideas, sino que hemos participado con nuestro trabajo voluntario. En su momento, le hemos hecho llegar a los dirigentes del MAS nuestro pensamiento y nuestro actuar.

El MAS ofreció a los votantes domingueños, entre otros y según palabras de don Roberto trabajar con esmero en seguridad, estructura vial, medio ambiente, economía, salud, deporte y recreación, cultura, juventud y oportunidades para todos los domingueños.  

Según don Roberto,  luchara por una municipalidad más eficiente  y transparente, además le entraran al tema del plan regulador para aprobarlo y asi reordenar el territorio que comprende el cantón.

El viernes 1 de mayo del 2020 iniciará su trabajo con el mandato de la ciudadanía que cubrirá desde el 1 de mayo del 2020 al 30 de abril del 2024, en un contexto nacional difícil por la emergencia nacional. Sin embargo, en las crisis es  donde surgen las grandes ideas y decisiones visionarias para un cantón que, a pesar de todos los errores que ha podido cometer a lo largo de su historia, se mantiene vigente aportándole al país con los valores del ser domingueño.

El Grupo Cívico Domingueño les desea los mejores éxitos en estas tareas y siempre tendrán en nosotros las sugerencias que deseen, con el fin de conseguir un cantón cada vez mejor para todos sus habitantes.

GRUPO CIVICO DOMINGUEÑO. Miércoles 22 de abril del 2020.


lunes, 20 de abril de 2020

La tapa de dulce es una bonita historia que viven en su época personajes de Santo Domingo de Heredia


La tapa de dulce

El 19 de abril se cumplen setenta y dos años del acuerdo que puso fin a la revolución del 48.  De esa época hay muchas narraciones, sobre realidades vividas por los protagonistas directos como también por los ciudadanos comunes.  Las obras escritas también son numerosas, y ofrecen una gran escuela para los costarricenses.

La situación se puede comparar en algunos rasgos a la de estas últimas semanas, aunque por diferentes razones; la gente tenía miedo de salir de sus casas, muchos perdieron sus empleos y la actividad económica se redujo.

Hay historias de Santo Domingo para ese tiempo, tristes y dolorosas muchas de ellas. La que brevemente me narraron es más bien simpática, sobre algunas limitaciones que se vivían todavía después de firmada la paz.

A ciertos meses de instalada la Junta de Gobierno, seguía la carestía, y entre lo que más hacía falta en los hogares, era el dulce, o tapa de dulce.  La gente de ese tiempo cuenta que las madres usaban confites para hacer agua dulce, bebida acostumbrada en las casas.

Llegó B adonde sus parientes para contarles que en Santa Elena de San Isidro vendían dulce, y proponerles que fueran a buscar.  Le dieron a L para que la acompañara, pues ya estaba en edad para mandados, y se fueron temprano el día siguiente. Ahora son dos señoras que cuentan esos recuerdos, pero algo reservadas para sus nombres.

Subieron por la calle del Guacalillo junto a la acequia, frente al beneficio de Challe hacia el Tures, la estrecha calzada de piedra; tomaron hacia San Miguel Sur, por la calle vieja hasta Castilla y San Luis; calles de zacate, algunas con partes de molejón incrustado.  Eran caminos estrechos y se caminaba con recelo por el ganado que pastaba cercas adentro, no fuera que alguna vaca brava o se saliera; la frondosidad de los árboles, con muchos higuerones, daba algún frescor a los caminantes.  No había cazadora y no quedaba más que caminar.   En San Luis pasaron donde el tío Sebastián.  Tenía un solar con una acequia y árboles de melocotones muy sabrosos.  Había  caídos en el suelo de color rojo, para coger.  

Al llegar a Santa Elena, encontraron el lugar; no recuerdan el nombre de la gente de allá; al dueño le decían Pololo.  Pero su sorpresa fue que solamente vendían una tapa por persona; "¡toda esta caminada por una tapa!" No hubo forma de que les vendieran más.  Se volvieron adonde su tío Sebastián, donde comentaron su decepción. Almorzaron y, decididas a obtener más dulce, se fueron de nuevo a Santa Elena pasado mediodía.  

Hicieron la fila, pero los encargados le dijeron a L: "no, m'hijita, a usted ya le vendimos en la mañana".  Hizo intento de desmentir, pero con mucha firmeza se la negaron: "como esos ojos y ese pelo no hay muchos, y no se olvidan tan rápido".

Fue tanta la rogada que al final les dieron la otra tapa para completar el atado.  Volvieron a San Luis; tomaron café y regresaron a Santo Domingo ya en el atardecer.

“¡Tanta andada por un atado de dulce! ¡Por esa caminada nunca engordé!”


Atte. Juan E. Cruz A.     19 de abril 2020